
Symborg mejora las cosechas de cereales y leguminosas con el tratamiento de semillas
Está presente en el Congreso Internacional de Semillas de la ISF en Brisbane
Symborg desarrolla bioestimulantes de alta eficacia mediante su aplicación en el tratamiento de las semillas para diferentes tipos de cultivos, especialmente cereales y leguminosas. Como miembro de la Federación Internacional de Semillas, ISF, Symborg mostrará sus soluciones basadas en microorganismos naturales dentro el Congreso Internacional de Semillas 2018 que se celebra del 3 al 6 de junio en la ciudad australiana de Brisbane.
Este congreso internacional organizado por la Federación Internacional de Semillas, es el principal evento mundial de la industria de las semillas y se viene celebrando desde 1924. El Congreso atrae a más de 1500 delegados de las empresas más importantes del sector y congrega a investigadores y productores agrícolas de todo el mundo. La ISF es una organización no gubernamental, que representa los intereses del sector de las semillas. Symborg entró a formar parte de la misma el pasado año, tras ser anunciado como uno de sus miembros durante el pasado congreso internacional celebrado en 2017 en Budapest.
Tratamiento de semillas
Las semillas tratadas mejoran la cantidad y calidad de las cosechas y la capacidad de respuesta de los cultivos frente a enfermedades y otros riesgos fitosanitarios. Además, con el tratamiento de semillas se reduce el número de unidades improductivas, contribuyendo a no malgastar recursos en semillas que no germinan, y permite aplicaciones con dosis más bajas, disminuyendo los costes para la adquisición, transporte y aplicación de los tratamientos.
Biotecnología de Symborg
Symborg proporciona a las semillas de cereales de grano (maíz, soja, girasol o leguminosas en general) microorganismos que se convertirán en futuros agentes beneficiosos para el desarrollo de la planta. Es el caso del inoculante micorrízico Resid HC, basado en el hongo formador de micorrizas Glomus iranicum var. tenuihypharum, descubierto y patentado por Symborg.
Las unidades infectivas de este Glomus son capaces de permanecer inactivas de manera prolongada en las semillas hasta que éstas germinan y comienzan a desarrollar las raíces. Entonces, este potente Glomus se activa y comienza a colonizarlas formando simbiosis con ellas. Produce abundante micelio extramatrical, y hace que estás se desarrollen más y que sean capaces de explorar una mayor cantidad de suelo ayudándolas a absorber los nutrientes y el agua del suelo.
Con una nutrición más abundante y equilibrada, la planta alcanza un balance hormonal más controlado y muestra una mejor respuesta a cualquier tipo de estrés abiótico. Aumenta la actividad fisiológica y fotosintética mejorando la capacidad productiva del cultivo.
Además, este potente Glomus tiene una alta capacidad de supervivencia incluso en suelos salinos y es compatible con los protocolos de fertilización utilizados actualmente en la agricultura convencional. Se basa en un principio biológico natural y no produce residuos indeseables en las plantas ni altera sus características genéticas. Es un método 100% compatible con el medio ambiente.
Porcentajes de incrementos productivos
Numerosos ensayos de campo realizados con diversas variedades de maíz demuestran incrementos productivos medios del 8% respecto a los cultivos no tratados. Las plantas de maíz nacidas de semillas tratadas con Symborg generan mazorcas de mayor tamaño y peso, aumenta el número y calibre de los granos en todas las variedades. Lo mismo sucede con otros cereales: en trigo, los resultados demuestran aumentos productivos que van desde el 9.7% hasta el 16% según variedades; en cebada, el número de toneladas recogidas por hectárea se incremente desde un 8.5% a un 15% según variedades y en soja los incrementos medios son del 8,5%.
El tratamiento de las semillas antes de la siembra ha demostrado ser un eficaz método contra agentes patógenos y potencia el rendimiento productivo de los cultivos. Los conocimientos científicos en este campo han avanzado mucho en los últimos años y el tratamiento de semillas se ha convertido en un importante pilar para superar las exigencias de productividad y rentabilidad de la agricultura actual.